Tiempo de lectura: 6 min.
Han pasado 150 años de la Primera Expedición Misionera Salesiana. Pero la 150ª Expedición Misionera Salesiana es mucho más que un aniversario numérico. Es un evento que narra la fidelidad en el tiempo a un carisma nacido del corazón de Don Bosco y entregado a la Iglesia para el bien de los jóvenes. Era 1875 cuando, desde Valdocco, Don Juan Bosco enviaba a la Patagonia a los primeros diez misioneros liderados por Don Juan Cagliero. Desde entonces, ininterrumpidamente, cada año, la Congregación Salesiana repite ese gesto misionero que no es una simple tradición, sino expresión de una identidad profunda: llevar el Evangelio a los jóvenes, especialmente a los más pobres, allí donde la vida llama.
150 Años de la Primera Expedición Misionera. Agradecer el pasado, repensar el presente, relanzar para el futuro
Con los 150 años de Expediciones Misioneras, los Salesianos de Don Bosco reviven ese momento fundacional en el espíritu de hoy, con la conciencia de que el mundo ha cambiado, que las misiones ya no son solo «partidas» hacia lugares lejanos, sino testimonios vivos también en contextos urbanos, secularizados y digitales. Este aniversario se convierte así en una gran oportunidad para agradecer, repensar y relanzar la vocación misionera salesiana.
Agradecer: un tesoro de audacia y fe
Celebrar 150 expediciones misioneras es ante todo un acto de gratitud. Es mirar hacia atrás con gratitud hacia una historia que ha visto el coraje convertirse en gesto concreto y el sueño convertirse en vida.
Gratitud por el coraje misionero de Don Bosco. Enviar misioneros a la Patagonia en 1875 no fue una elección obvia. Requirió fe, coraje y capacidad de mirar lejos. Don Bosco no dudó en arriesgarse, sostenido por una confianza inquebrantable en María Auxiliadora y en una pasión ardiente por la salvación de las almas.
Gratitud por los 10.700 misioneros salesianos que, desde 1875 hasta hoy, han sido enviados a todo el mundo. Con ellos, miles de FMA, cooperadores, voluntarios y laicos misioneros han compartido la misma pasión educativa y evangelizadora, a menudo en condiciones de pobreza, guerra, aislamiento o incomprensión.
Gratitud por millones de jóvenes alcanzados, alfabetizados, acompañados en la fe, arrancados de la miseria, el abandono o la violencia. Cada oratorio fundado, cada escuela abierta, cada casa de acogida construida es un signo concreto del amor de Dios que se hace presencia a través de la caridad educativa de Don Bosco.
Gratitud por la presencia salesiana hoy en 137 países del mundo, testimonio vivo de un carisma que ha sabido atravesar fronteras geográficas y culturales, adaptándose sin perder su alma: el «Da mihi animas, cetera tolle«.
Repensar: leer los signos de los tiempos para ser misioneros hoy
Sin embargo, el tiempo de la gratitud no es suficiente. El mundo misionero está cambiando y los Salesianos están llamados a repensar su presencia para ser fieles al Evangelio y al mismo tiempo atentos a las necesidades reales de los jóvenes de hoy.
Repensar significa tener una visión renovada de las misiones. La misión no es solo «ad gentes«, sino también «inter gentes» e «inter culturas«. Hoy la misión es profundización cultural y diálogo educativo. Es construir puentes y no barreras, es anunciar a Cristo también a través de la promoción de lo humano.
Presencia entre los creyentes de otras religiones. Los misioneros salesianos viven a menudo en contextos de mayoría musulmana, hindú o budista. Aquí la misión pasa a través del diálogo, la fraternidad y el testimonio silencioso de una vida entregada, donde la escuela y el oratorio se convierten en lugares privilegiados de paz y convivencia.
Vivir en contextos secularizados. También las grandes metrópolis occidentales son hoy tierra de misión. Aquí los jóvenes sufren soledades digitales, crisis de sentido, adicciones y desempleo. La presencia misionera salesiana no puede ignorar estos desafíos urbanos, donde el Evangelio debe volver a hablar al corazón de una sociedad fragmentada.
Afrontar nuevos desafíos y perspectivas. Migraciones, pobreza educativa, emergencias humanitarias y crisis ambientales marcan este tiempo. La misión salesiana está llamada a ser profecía de esperanza, con obras concretas que eduquen en la fe, la justicia, la ciudadanía y el cuidado de la creación.
Relanzar: reavivar el celo misionero
La celebración de los 150 años de misión no es una meta: es un nuevo comienzo. El futuro misionero de la Congregación depende de la capacidad de relanzar con coraje, creatividad y profecía.
Relanzar el celo misionero entre los jóvenes pobres. Ellos siguen siendo el centro de la misión salesiana. Son los chicos de las periferias urbanas, los jóvenes sin trabajo, los migrantes sin derechos, los menores víctimas de trata, los chicos de las favelas, de las villas miseria y de los barrios de chabolas. El carisma de Don Bosco nace para ellos y con ellos seguirá viviendo.
Estar presentes en las nuevas áreas de misión. Hay regiones que aún esperan la presencia salesiana: áreas rurales de África, pueblos aislados de Asia, comunidades indígenas de la Amazonía, periferias olvidadas de Europa. El futuro de la misión pasa por la capacidad de salir de nuevo, de ponerse en camino con humildad y audacia.
Renovar la misión en las áreas donde el carisma debe ser reavivado. No se trata solo de abrir nuevas obras, sino también de regenerar las existentes. Muchas comunidades misioneras piden hoy nuevas energías, más presencia entre los jóvenes, más comunión entre consagrados y laicos, más creatividad evangelizadora. La misión es ante todo conversión del corazón.
Los 150 años de la primera Expedición Misionera son una invitación a volver a poner a Cristo y a los jóvenes en el centro. Agradecer el pasado, repensar el presente y relanzar el futuro son tres verbos que custodian el sentido de esta celebración. Don Bosco sigue diciendo a sus hijos e hijas: «Vuestra patria es el mundo entero«. Con este espíritu, los misioneros salesianos seguirán caminando por las calles del mundo, para que cada joven pueda sentirse amado y encontrar el rostro bueno de Dios.
La misión es una sola: la recibida de Jesús, de anunciar el Evangelio según el carisma salesiano. La grandeza de este mandato se reconoce también en la generosidad de tantos salesianos que, en el transcurso de 150 años, han respondido con su «sí» a esta llamada. También los números atestiguan el impacto extraordinario de esta obra. Presentamos, pues, los misioneros enviados por Don Bosco hasta hoy:
| Rectorado | Período | Misioneros | |
| Don Bosco | 1875-1888 | 153 | |
| Don Rua | 1888-1910 | 1528 | |
| Don Albera | 1910-1921 | 501 | |
| Don Rinaldi | 1922-1931 | 1984 | |
| Don Ricaldone | 1932-1951 | 2665 | |
| Don Ziggiotti | 1952-1965 | 1455 | |
| Don Ricceri | 1965-1977 | 740 | |
| Don Viganò | 1977-1995 | 870 | |
| Don Vecchi | 1996-2002 | 196 | |
| Don Chávez | 2002-2014 | 355 | |
| Don Fernández | 2014-2024 | 253 | |
| Total | 1875-2024 | 10700 | |
Y añadimos también los 19 misioneros de este año, 2025, doblemente jubilar:
| País de origen | Nombre | Destino |
| Rep. Dem. Congo | Josue NGUSU NSIMBA | Grecia |
| Rep. Dem. Congo | Jean NTUMBA LILEY | PGS-Vanuatu |
| Rep. Dem. Congo | Michel MBUNGU MAKUTUBU | CIL |
| Kenia | Solomon BALIKUDDEMBE | INC – Bangladesh |
| Uganda | Isaac OFOYRWOTH | PGS-Vanuatu |
| Bolivia | Paolo Estefano LENAZ | BMA |
| Japón | Chihiro MORITO | AFE-Sudán |
| India | Zabenthung Dominic HUMTSOE LOTHA | INE-Rumanía/Moldavia |
| India | Molson Hubert UTTAM | AFM |
| Madagascar | Charles NIRINA RASENDRAMANANA | GER-Turquía |
| Polonia | Marcin WOSIEK | Grecia |
| Zambia | Mwila MUMBA | INC – Bangladesh |
| Zambia | Musa NG’ANDWE | INE-Rumanía/ Moldavia |
| Timor Oriental | Tobias Freitas DO NASCIMENTO | MOZ |
| Angola | Francisco Miguel DA GRAÇA | BMA |
| Vietnam | Francis TRAN VAN NHO | THA/Camboya |
| Vietnam | Simon NGUYỄN THANH SANG | KOR-Mongolia |
| Vietnam | Vincent NGUYEN TIEN NAM | CIL |
| Vietnam | Chuyen NGUYEN | AFM |
Otros nueve salesianos que por diversos motivos no participaron en los envíos misioneros pasados, se unirán para recibir la cruz misionera.
Presentamos también el programa diseñado para este evento, que se celebrará en Valdocco – Turín, entre el 8 y el 12 de noviembre.
El programa del 150º aniversario de la Primera Expedición Misionera Salesiana
8-9 de noviembre: Encuentro de los jóvenes de la Animación Misionera italiana, BeAMission
8-11 de noviembre: Encuentro mundial DIAM (Delegados Inspectoriales para la Animación Misionera)
11 de noviembre: 156ª Expedición Misionera Salesiana SDB y 148ª FMA. La Santa Misa se celebrará a las 17:00, en la Basílica María Auxiliadora y se transmitirá en directo por el canal de Youtube ANS, de la Agencia Info Salesiana
12 de noviembre: Inauguración del Museo de las Expediciones Misioneras Salesianas en Génova
13-15 de noviembre: Consulta del Sector para las Misiones
Programa detallado
BeAMission
8 de noviembre, 14:00: Lanzamiento de actividades e inicio del programa
8 de noviembre, 20:45: Fiesta misionera
9 de noviembre, mañana: Living libraries y diálogo con los nuevos misioneros
9 de noviembre, 15:00: Misa y envío misionero de los jóvenes
9 de noviembre, 16:30: Refrigerio y saludos
Encuentro mundial DIAM
9 de noviembre, 19:00: Vísperas e inicio del encuentro
10 de noviembre: Formación, intercambio y reflexión
10 de noviembre, tarde: Presentación Bosco Food
11 de noviembre, mañana: Encuentros continentales y regionales DIAM
11 de noviembre, 15:00: Encuentro con el Rector Mayor, Don Fabio ATTARD
11 de noviembre, 17:00: 156ª Expedición Misionera Salesiana SDB y 148ª FMA en la Basílica María Auxiliadora
12 de noviembre: Jornada en Génova e inauguración del Museo de las Expediciones Misioneras Salesianas
12 de noviembre, tarde: Conclusión del encuentro DIAM

